Y yo os pregunto, ¿qué sois?

 Yo que le temo más que a nada a caer en la demagogia, a no entender la realidad compleja o ceder a los prejuicios he intentado evitar hace ya demasiado tiempo enjuiciar al cuerpo de policía. Si bien un individuo no puede ser juzgado por las acciones de la mayoría, un cuerpo de seguro sí. ¿Pero quién es mayoría? ¿Es aquel que cumple con su deber, siendo este defender al ciudadano y sufre cuando las órdenes que se le dan van en sentido contrario o aquel que hace alarde de su disfrute riendo mientras sus víctimas huyen o (haciendo su aparición estelar en algún foro) se pavonea de su frustración por no haber podido repartir leña?

 Sin embargo empiezo a pensar que no es a mi a quien debo hacer elegir... si no que sois vosotros, los policías, los que debéis escoger vuestro papel. Y yo os pregunto, ¿qué sois? ¿Qué queréis ser? ¿Sois los perros guardianes del amo que os paga y azuza sobre el pueblo obrero que clama por sus derechos? ¿O sois los guardianes del pueblo? ¿Sois el niño que soñaba con proteger al resto o el que atemorizaba a sus compañeros? ¿Entrasteis por vocación o para que os dieran excusa y arma? ¿Formáis parte de ese pueblo que pierde derechos para que unos pocos los ganen o los centinelas que se conforman con las migajas del tío Gilito? ¿O los nietos de los grises echando de menos al tito Franco?

Si para vosotros son más importantes unas etiquetas y llamar "perroflautas" a los que antes eran masones, aferrándoos a una creencia estúpida de que la derecha, la tradición, estaba en lo cierto, que os acogería, que os justificaría cuando cargarais contra viejos, contra fotógrafos, contra niños... Estabais equivocados, la derecha que os había de salvar os aplaude, pero os quita derechos y nadie podrá devolvéroslos cuando no quede quien proteste.

 ¿No tenéis hijos que estudien, ni hermanos en paro, ni padres pensionistas? ¿No teníais, como cualquier funcionario, paga extra? ¿No os indigna lo mismo que a lo demás? ¿No veis que no son ajustes si no robos, si ellos ganan más que antes y solo unos perdemos? El dinero no desaparece en una crisis, sólo cambia de manos. Pensad en donde ha ido y a quien estáis defendiendo.

"Primero vinieron a buscar a los comunistas, y yo no hablé porque no era comunista. Después vinieron por los socialistas y los sindicalistas, y yo no hablé porque no era lo uno ni lo otro. Después vinieron por los judíos, y yo no hablé porque no era judío. Después vinieron por mí, y para ese momento ya no quedaba nadie que pudiera hablar por mí".  Martin Niemöller